No, no llovió. O mejor dicho, este año casi no llovió, lo cual como siempre es bueno y malo. Según como se mire. Porque si malo es que llueva tanto que las ramblas son ríos y una carrera a pie se convierte casi en un duatlón (
2008), peor es que haga tanto calor que la carrera se convierta en una travesía por el desierto (2007).
Este año, en cambio la
Maratoimitja desde Castellón hasta San Joan del Peñagolosa, tuvo un clima agradable, tirando a caluroso, y refrigerado en su último tramo por una ligera lluvia.

Por lo demás, la carrera como siempre de 65 km. y unos 2500 m. de desnivel de subida acumulado, a través de un magnífico paisaje, sobre todo en su tramo final, y en la que la "tozudez" de sus participantes consigue lo que a priori parece increíble: que la gran mayoría acabe la prueba... a pesar de su dureza. No obstante, viendo su
recorrido (aquí el link para verlo en Google Earth), ya te sugiere que la variedad de paisajes que recorres en un sólo día... vale la pena.
Como siempre hay que felicitar a la organización, magnífica más si cabe la extensión y duración de una prueba de este tipo. Avituallamientos, logística para el regreso, "regalos"... y demás muy bien. No obstante, como viene siendo habitual dos sugerencias:
1. Que parte de la magnífica comida que se da en el control de San Miquel (40 i pico km.) debería estaría en meta, que es donde realmente llega uno con hambre.
2. Sería interesante alargar un pelín el horario de entrega de dorsales, puesto que los que venimos de fuera y trabajamos el mismo viernes a veces llegar a las 9 es un poco justo.
No obstante, queremos agradecer a la organización, porque a pesar de llegar a las 9 y pico y estar ya desmontando el chiringuito de los dorsales, nos proporcionaron un nuevo dorsal y chip para realizar la carrera al día siguiente.
Por último, no nos podemos quejar, de 6 personas que fuimos, los 6 terminamos y por tanto, nos volvimos satisfechos del
deber cumplido. Y por supuesto para celebrarlo... un bueno chuletón en la cena del mismo sábado para recuperar las fuerzas perdidas.
El año que viene.... más.